domingo, 23 de octubre de 2011

La otra cara de Rubalcaba y Rajoy

Mariano Rajoy y Alfredo Pérez Rubalcaba, son dos políticos que juegan en bandos enfrentados. Mucho se conoce de sus vidas públicas, y poco de lo que son en realidad. Este artículo ha sido tomado a partir de las dos entrevistas que les realizó la revista Telva en su edición del mes de octubre


 Mariano Rajoy

Mariano Rajoy es nieto de Enrique Rajoy Leloup, uno de los redactores del Estatuto de autonomía de Galicia en 1932 que fue apartado de la docencia universitaria por la dictadura hasta principios de los 50 y es hijo del también jurista Mariano Rajoy Sobredo, presidente de la Audiencia Provincial de Pontevedra, ciudad donde creció. Licenciado en Derecho por la Universidad de Santiago de Compostela, comenzó a preparar las oposiciones a Registrador de la Propiedad en el último año de carrera y las aprobó al año siguiente. Con 24 años se convirtió en el registrador más joven de España. Fue destinado a Padrón (Galicia), a Villafranca del Bierzo (León) y a Santa Pola (Alicante) del cual todavía es titular.
Lleva casi un año practicando ejercicio enserio; confiesa que todos los días hace o 6 kilómetros de marcha o bicicleta estática en su casa. Además se considera forofo del Real Madrid y del ciclismo, de hecho tiene en su despacho un diploma del Club de Amigos de la Vuelta.
Esta es la tercera vez que se presenta a las elecciones generales, y ha formado parte de todos los gobiernos de José María Aznar, como ministro de Educación, de la Administración Pública, del Interior y de la Presidencia, además de vicepresidente del gobierno. Por eso considera que lo avala la experiencia de gestión en los momentos difíciles. "Yo no engaño, no voy a prometer lo que no puedo cumplir"


Su despacho es sobrio y diáfano, donde la colección completa de las obras de Cánovas del Castillo son el principal elemento de decoración. En su vida personal, sus elementos de decoración son, sin embargo, su mujer Elvira Fernández  Balboa, Viri, y sus dos hijos de 12 y 6 años, Mariano y Juán. Ella le aporta equilibrio y sentido del humor.
La persona que más le ha influido en su vida ha sido su padre, del que dice que ha sido un hombre del derecho, un jurista que tiene la convicción de que" la justicia es un equilibrio entre diferentes posiciones". Mariano cree que, de hecho, se parece mucho a él, pues ambos son perfeccionistas y algo introvertidos, aunque eso sí, muy prudentes. De sus padres ha heredado el respeto, la independencia y la justicia. Y lo´más sorprendente es que no habla de política con su padre.
Lo que más valora de las mujeres es su generosidad y el fuerte sentido del deber que las hace no tener horarios ni poner reparos cuando se espera lo mejor de ellas. Por eso Rajoy se enorgullece al recordar que "las primeras presidentas del Congreso y del Senado fueron del PP".
Las clases de inglés le van bien, aunque confiesa que le cuestan, de hecho estudia varias horas a la semana.
Durante los próximos 15 días de campaña electoral, pretende recorrer 12.000 km, un auténtico maratón, aunque confiesa que toda su vida política lo ha sido desde que la comenzara en 1982.


Alfredo P. Rubalcaba 
Hijo de un aviador del bando sublevado en la Guerra Civil, luego piloto de Iberia, y nieto de un republicano, fue pieza clave de los ejecutivos de Felipe González y posteriormente de los de Rodríguez Zapatero.  Ingresó en el PSOE en 1974, en el que comenzó a colaborar en la Federación Socialista Madrileña y, más tarde, en las comisiones de Enseñanza e Investigación tanto del partido como del Grupo Parlamentario Socialista. Compatibilizaba estas colaboraciones con sus estudios y la práctica del atletismo llegando a correr en el año 1975 los 100 metros lisos en 11,2 segundos en los campeonatos nacionales universitarios defendiendo los colores de la sección de atletismo del Celta de Vigo. Obtuvo la plaza de Profesor Titular de Química Orgánica en el departamento del mismo nombre de la Universidad Complutense de Madrid. También trabajó en la Universidad de Constanza (Alemania) y en la Universidad de Montpellier (Francia). Sus trabajos de investigación se centraron en los mecanismos de reacción publicando una treintena de artículos científicos.
 
Alfredo dice que lo único que no admite en la vida es la mentira, aunque sabe que en política no siempre se puede decir lo que se sabe porque sería algo insensato, aunque intenta ajustarse a la realidad lo más fielmente posible. Recuerda que el primer consejo que le dieron cuando fue nombrado portavoz del Gobierno fue "el peor error que puedes cometer es mentir porque tarde o temprano te acabarán pillando".
Confiesa que ya no practica ningún deporte porque asegura no tener tiempo, pero que es una de las cosas que más echa en falta en estos momentos. Su ritmo de trabajo le obliga a tener 14 horas de trabajo diarias y poco tiempo para el sueño. "Este trabajo te succiona".
Lleva metido en política desde hace 35 años y desde la primera vez que se puso delante de un micrófono ha intentado prepararse muy bien las intervenciones, porque considera que "los políticos tenemos la obligación de explicar a los ciudadanos por qué actuamos de una manera determinada". De ahí que muchos piensen que maneja los hilos de la comunicación como nadie y que te lleva a su terreno en las distancias cortas.
El paso del tiempo y la experiencia le ha hecho ser más comprensivo, aunque afirma no haber pedido nunca su  memoria y su paciencia. "No soy rencoroso, tengo cierta capacidad de análisis y soy muy crítico conmigo mismo".
"Yo he durado tanto tiempo porque he trabajado mucho, he sido siempre honesto y no he cambiado mis principios" Estos valores asegura haberlos mantenido incluso en los momentos más difíciles de su vida. Y es que Alfredo ha perdido a tres de sus hermanos, quizás por eso odie las fotografías, "en casa las tengo todas sin ordenar porque solo recuerdan al pasado".

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